miércoles, noviembre 13

20/40


El escritor chileno Antonio Díaz Oliva es el antologador de la Primera Entrega de la colección 20/40, (Veinte autores latinoamericanos menores de cuarenta años) que la editorial SubUrbano acaba de lanzar en formato digital. La obra recoge cuentos de los autores Maximiliano Barrientos (Bolivia), Juan Álvarez (Colombia), Fernanda Trías (Uruguay) y Ezio Neyra (Perú).

Siguiendo la idea trazada por Poe, los cuentos de esta Primera Entrega están construidos para ser leídos “de una sola sentada”. El dinamismo de las historias y la complejidad de los personajes acompañan a una narración atravesada por una línea común: la memoria.

El título del cuento de Maximiliano Barrientos, Una vida nueva, es el arranque para una diversidad de conexiones y posibles conclusiones. El cuento narra la historia de una familia que acaba de terminar, un hombre que va en busca de su esposa, que acaba de abandonarlos a él y a su hijo de once años.

El cuento es la metáfora perfecta. Es el inicio de una nueva vida para una mujer que escapa de la aburrida vida marital, llena de peleas y golpes, para huir con el Chatarrero, pero a la vez es una nueva vida para un hombre cuya esposa lo ha dejado y que a pesar de sus intentos no logró persuadir para que se quedara con él y al mismo tiempo es una vida nueva para un niño cuya familia acaba de separarse y debe enfrentarse a la realidad común en el imaginario familiar occidental: padres divorciados.
“Seguro que a tu mujer se la andan culiando en el Paraíso o en uno de esos moteles de la zona”
La verdad tiene estructura de ficción, afirmaba Lacan, ¿qué tanta verdad se narra en este cuento?

“Chalino” Sánchez o el Pelavacas es el protagonista del cuento Narcocorridos  de Juan Álvarez, el segundo en esta colección, que cuenta la historia del flamante cantante de corridos y su inesperada muerte intercalada con la letra de una de sus canciones.

La leyenda de “Chalino” empezó en California cuando en una tarima de un salón intentaron matarlo, él se defendió a pesar de las heridas de bala que llevaba encima, la suerte, sin embargo, no lo acompañaría por siempre. Unos meses más tarde encontrarían su cuerpo en una cuneta.

La vida de un compositor terminaba, pero la leyenda recién empezaba.

¿Qué hizo de “Chalino” Sánchez un símbolo comparable con un Tupac Shakur mexicano?
“El bolero es sobre todo una forma de ver el mundo, ‘la manera latina’, que dicen, de encuadrar el amor, el odio, la envidia, la pasión, el desamparo, la soledad, la necesidad… el corrido es entonces, y apenas y en cambio, una forma cantada de padecerlo todo”
Fernanda Trías, con Bienes muebles, nos lleva a tierras argentinas con una historia de jóvenes amantes. Una voz femenina en primera persona nos narra una fiesta y las cosas inusuales que le llaman la atención: el vuelo de una mosca.

La concepción de la realidad, del tiempo y del espacio son imprecisos al igual que la concepción de lo masculino y lo femenino, pero aquello no es relevante en la historia de una joven que se busca en la mirada del otro.
“Estábamos unidos por el agua, en nuestros fluidos, en nuestra baba, en el sudor de nuestros cuerpos nocturnos”.
Ezio Neyra nos muestra el dolor de lo que significa reencontrarse con el pasado.

Fueron muchos años adentro es la historia de un hombre que luego de pasar mucho tiempo encerrado no logra concebir su libertad, no sabe cómo comportarse ni reaccionar a gestos tan simples como el afecto o el amor y que, además, vive atormentado por los recuerdos de su vida de convicto que lo persiguen.
“Él no sabía nada más. Ya había dicho todo. Aún así, lo forzaban a sentarse y amarraban sus brazos y sus piernas contra el respaldar de la silla y, tras golpearlo, lo dejaban marchitado en su celda”.
Autores de diferentes países encontrados en un lugar del mundo, Estados Unidos, nos traen una colección de cuentos cuyo denominador común es el recuerdo. El recuerdo no como la acción pasiva de recorrer la vida a través de la memoria, sino como la alusión de imágenes y sucesos a partir de un hecho.

Marcel Proust afirmaba que una vez que el escritor nos ha puesto en ese estado en el que toda emoción se multiplica por diez, en el que el libro nos turba como un sueño, pero no un sueño común, sino uno que dura más que el recuerdo, es ahí cuando desencadena en nosotros, por una hora, todas las dichas y desgracias que en la vida normal nos tomaría años vivirlas. 

Así, las experiencias e interrogantes acaecidas a propósito de la lectura de esta Primera Entrega son infinitas: ¿Qué nos quitó la vida, que nos está cobrando?, sólo algunas preguntas como para empezar.