La
crítica realizada por Elaine Showalter en “Hacia una poética feminista”
Escritura de mujeres y escribir sobra las mujeres, se puede utilizar para
realizar un análisis de la obra Poesía Patriarcal de la escritora
norteamericana Gertrude Stein. El contenido de Poesía Patriarcal se presenta de
manera compleja al lector debido a la particular escritura que Stein empleaba,
omitiendo los signos de puntuación y utilizando la repetición de palabras,
características que constituían su escritura de vanguardia. Sin embargo existe
otro factor, de carácter más relevante aun, a través del cual se puede
comprender la escritura y el contenido de la obra en sí, aquel factor es “el patriarcado”, al cual se alude a través
del título de la obra.
La
distribución irregular del poder entre los hombres y las mujeres, en la cual el
género masculino obtiene un mayor número de beneficios en los distintos ámbitos
socio-culturales. No obstante, Stein propone en su obra que “el patriarcado” se
puede hallar además en la gramática, planteando una “gramática patriarcal”. Una
gramática que se encuentra sujeta a las diferentes leyes y cánones establecidos
por medio de los cuales se logra fomentar una “estabilidad gramatical”, la cual se encuentra, de acuerdo a lo que
desarrolla Stein, relacionada con “el patriarcado” debido a que el término
“estabilidad” presenta una notoria conexión con la figura patriarcal de poder
(es decir el hombre), es por ello que los recursos lingüísticos que emplea
Stein poseen un carácter no convencional, mediante el cual se puede afirmar lo
que explica Showalter en cuanto a la búsqueda de “un nuevo lenguaje, una nueva
lectura que se puede integrar a nuestra inteligencia y nuestra experiencia,
nuestra razón y nuestro sufrimiento, nuestro escepticismo y nuestra visión.”[1]
Stein, a través de su escritura, quiere deshacerse de aquella dependencia (a
las normas) que se encuentra contenida en la gramática convencionalmente
estructurada, y deshacerse del nexo que
existe entre ésta y el “poder patriarcal” también.
Aquel
sentido patriarcal, propone Stein, podría llegar a encontrase inclusive en el
día a día de nuestra existencia, con la monotonía y las regulaciones
establecidas por el orden jerárquico existente, el cual determina el valor que
se debe atribuir a nuestras acciones e incluso a nuestro lenguaje. Stein se
despoja del orden y las normas establecidas para encontrarse cada vez más cerca
de obtener un mayor poder y sentido feminista y distanciarse en lo posible de
aquel “poder patriarcal”.
Otro
punto importante se desarrolla en la obra de Gertrude Stein, punto que es
planteado por Showalter, quien afirma que, el objeto de estudio no se halla en
la experiencia de la mujer, sino en “lo que los hombres han pensado que la
mujer debe ser.”[2]
La participación de la mujer ha sido, a lo largo de la historia, restringida
por los estatutos sociales impuestos, los cuales delimitaron sus funciones de
una manera trascendental, ya que fueron necesarios un número extenso de años
para que se llevara a cabo una diferencia sustancial. En la obra de Stein, ocupando un espacio de dos
hojas, se halla una parte que hace una particular y notoria referencia en
cuanto al rol de la mujer: “Let her be to be to be to be let her be to be to be
let her to be let her to be let her be to be when is it that they are shy…”[3]. Con su característica repetición de
palabras, Stein proclama en su obra “Poesía Patriarcal” el derecho que merecen
las mujeres de poder decidir sus acciones sin ser éstas cuestionadas o
reguladas por la sociedad. La expresión dominante en aquel poema es “let her
be” que traducida significa “déjala ser”, una petición que se halla dirigida
precisamente a aquel inconveniente previamente mencionado, siendo ésta la base
de todo el poema, además de ser la expresión mayoritariamente escrita. Stein
era consciente del poder que poseía el sexo masculino, el cual le permitía a
este fácilmente ejercer y tomar decisiones en los diferentes campos laborales,
educativos, etc. Aquella facilidad que posee el hombre se fundamenta en la
premisa de que este ha contado con la posibilidad de escoger, no ha tenido que
ser aquello que este no haya querido ser, situación que por su parte las
mujeres sí han atravesado.
Aquella expresión “let her be” engloba algo
más que su significado original, engloba la connotación “permitir”; el hombre
ha tenido la oportunidad de escoger, la sociedad no se ha opuesto a esto, sus
decisiones han sido permitidas, mientras que la mujer ha estado delimitada por
una cultura patriarcal que ha hecho de ella alguien que, no en todas las
ocasiones, ha querido ser, no ha permitido que ésta sea lo que desee ser. Stein
recurre a una extensa repetición de palabras para manifestar su oposición ante
aquella cultura patriarcal y su deseo de que la mujer, al igual que el hombre,
pueda sin ningún tipo de intervención o control, decidir entre aquello que ésta
desea ser o no ser.
El texto de Stein, además, otorga una
reflexión, no del todo explícita, en cuanto a la problemática que gira en torno
a la igualdad de género, situación que se vivió con mayor intensidad en la
época a la cual ella pertenecía.
Además se puede apreciar otro elemento de
carácter feminista, un poema denominado “A Sonet”[4] o en español “Un Soneto”, el cual hace
referencia a la conceptualización de la feminidad por parte del patriarcado; aquel
poema refleja la manera en la que la sociedad, una sociedad patriarcal, ha
definido, dentro de los parámetros considerados aceptables, lo que es el ser
una mujer, siendo errada esta acción, ya que, como argumentaba Simone de
Beauvoir, la feminidad es un factor cultural, es decir que no se nace mujer,
sino que se llega a serlo. La sociedad patriarcal por su parte desea acoplar a
la mujer de acuerdo a sus modelos, siendo estos equívocos.
[1] Showalter, Elaine.
“Hacia una poética feminista”, Escritura de mujeres y escribir sobre las
mujeres. Londres:
Croom Helm, 1979.
[2]
Showalter, Elaine. “Hacia una poética feminista”, Escritura de mujeres y
escribir sobre las mujeres. Londres:
Croom Helm, 1979.
[3] Stein,
Gertrude. Patriarchal Poetry. Pág. 120-121. 1957.